Rutinas Varias
Shares
  • You are here:
  • Home »
  • Gredos »

Al Pelao Bernardo y a la Laguna de la Nava desde Navalguijo

Shares

Hay veces que cuando uno mira atrás se acuerda más de unos momentos que de otros de los que has vivido. Sin lugar a dudas la ruta que ahora describo fue uno de esos momentos que permanecen en la memoria para siempre. Ocurrió hace ya algunos años. El lugar, uno inmejorable: Gredos.

La ruta que hicimos la dividimos en dos jornadas de la siguiente manera:

Día 1: Navalguijo – Cuerda Campillo – Pico Picario (1.877 m.) – Canchal Blanco – Cumbre del Cuchillar (2.089 m.) – Pelao Bernardo (2.214 m.) – Laguna de la Nava (11,5 kilómetros)

Día 2: Laguna de la Nava – Garganta de la Nava – Garganta de Galín Gómez – Nava del Barco – Navalguijo (16,5 kilómetros)

En total sale un recorrido de 28 kilómetros que puede hacerse en una sola jornada. Yo lo he hecho en una sola jornada en dos ocasiones. Pero con el inconveniente de que es tan bonito el paisaje y tiene tantas posibilidades que no te permite disfrutar del entorno como uno quiere. Por eso el principal motivo para dividir la ruta en dos jornadas fue el disfrutar de la bajada de la Laguna de la Nava como las veces que habíamos bajado anteriormente por ahí nos hubiera gustado hacerlo. En esta ocasión nos desquitamos. Y lo vais a ver.

Salimos de noche de Navalguijo. Sobre las 7 de la mañana comenzábamos a caminar por el camino que nos conduce a la Cuerda Campillo. En el mapa que adjunto podéis verlo. No puede accederse directamente a la cuerda. Si no que hay que atravesar un pequeño bosque formado fundamentalmente por pinos que queda justo detrás del pueblo. Tras zigzaguear varias veces se llega a la cuerda. Parece corto, pero no lo es. Desde Navalguijo hasta el Picario, nuestro primer objetivo, hay 6 kilómetros. Sobre las 9 de la mañana estábamos en la cima.

En la Cuerda de Campillo hacia el Picario (1.877 m.)

Os tengo que decir que ese cordal es infinito. Es el típico que parece que ya se acaba, pero cuando llegas a lo que hasta ahora había sido el horizonte, todavía queda más. Y así sucesivamente. Al ser cuerda, los piornos debido a la acción del viento no son altos habiendo espacio suficiente para pasar entre ellos.

Entre los piornos

Poco a poco, tras atravesar el impresionante Canchal Blanco, llegamos alcanzamos la cota 2000. Llegamos a la Cumbre del Cuchillar (2.089 m.)

Ascendiendo a la Cumbre del Cuchillar (2.089 m.)

¿Por qué se llama cuchillar? Sencillo. Esa parte del cordal es como un cuchillo. Ahí está el tramo peligroso de la ruta. Caídas enormes a ambos lados. Sobre todo hacia el lado derecho, la cara norte de la Cumbre del Cuchillar. Mucha precaución en este tramo. Antes de las 11 estábamos en la cima. Ahora toca seguir atravesando algo de canchal para después seguir por la cuerda. Toca hacer unas buenas trepadas en las que se utilizan las dos manos.

El Pelao Bernardo (2.214 m.) a tiro

En menos de una hora nos plantamos en la cumbre. Llegamos sobre las 12 de la mañana. Desde allí las vistas son inmensas. A nuestras espaldas se alza altivo el Pico Almanzor y todos sus secuaces.

Cumbre en el Pelao Bernardo (2.214 m.)

Frente a nosotros, ahí mismo, se levanta el Corral del Diablo (2.366 m.) y a sus pies la Laguna de la Nava. Toca bajar hacia el agua.

Corral del Diablo (2.366 m.) y Laguna de la Nava

Tenemos una bajada, en teoría cómoda, que se transforma en un infierno. Algunos decidimos tirar a través de los piornos, como en otras ocasiones, pero ahora habían crecido mucho. Nos tapaban. La bajada no resultó nada fácil llevándonos casi 4 horas. Como podéis ver en el mapa adjunto he pintado el itinerario que siguió otro miembro del grupo que bajó en una hora.

Corral del Diablo (2.366 m.) desde la Laguna de la Nava

Al final, tiene su recompensa. El paraje de la laguna es especial. El momento del atardecer proporciona silencio natural. Tras pasar una tarde de relax (Alguno subió hasta el Corral del Diablo). Con baño incluido. A la caída de la tarde plantamos las tiendas de campaña en el dique «rústico» de la laguna.

Noche en la Laguna de la Nava

Al día siguiente, sin prisa, y con muchas ganas de disfrutar partimos a recorrer minuciosamente cada rincón de la Garganta de la Nava.

Bajando hacia la Garganta de la Nava. Al fondo, el Pelao (2.219 m.)

Hacemos más kilómetros de los que pone en la ruta estándar debido a que vamos a visitar cada salto de agua. En diversas ocasiones dejamos las mochilas, trepamos o bajamos a alguna de las cascadas. Nos lleva su tiempo, pero merece mucho la pena.

El Corral del Diablo (2.366 m.) y los primeros saltos de agua de la Garganta de la Nava

Este primer gran salto de agua es uno de los que más a mano queda. Desde la misma bajada es visible.

En una de las numerosas cascadas de la Garganta de la Nava

Con el Corral del Diablo al fondo queda bien, ¿verdad?

Garganta de la Nava. Detrás el Corral del Diablo (2.366 m.)

En cambio, este siguiente paraje no es fácil encontrarlo. Buscamos sobre todo parajes como el de la fotografía. Con una buena poza debajo desde la que tirarnos desde cierta altura.

Una de las pozas en la Garganta de la Nava

No hay más fotos, aunque podría haber muchas más. El motivo es que los mejores rincones están en lugares escondidos en los que en la mayoría hay que meterse en el agua hasta el cuello, por lo que no se puede llevar cámara de fotos y enseñarlo aquí. Queda en la memoria. Recuerdo que nos tiramos a una poza desde unos 4 o 5 metros de altura. Pero ya sabéis que con el tiempo la altura en la memoria crece. A lo mejor no llegaba a 4 metros.

De ahí queda seguir el camino de marcado por los hitos que nos conducirá a Nava del Barco pasando por la preciosa Garganta de Galín Gómez. Todo esto está descrito en este mismo blog aquí: Subida a la Laguna de la Nava desde Nava del Barco.

Desde Nava del Barco hasta Navalguijo hay un paseo precioso. Salimos hacia el río. Desde el puente del pueblo se ven unos cortados en el río impresionantes. Desde ahí es tomar el camino que sale de frente teniendo en cuenta que en la bifurcación que nos encontremos hemos de coger el de la derecha. Nos lleva al área recreativa de Navalonguilla junto al río Garganta de los Caballeros. Si se conoce se puede aprovechar el camino para bañarse en algunas de sus benditas y cristalinas pozas. También frías. Pero a estas alturas uno lleva el cuerpo más que acostumbrado a dichas aguas.Os recomiendo la poza llamada por los del lugar, La Tabla.

Para acabar os muestro una foto panorámica de mi adorada laguna.

Panorámica de la Laguna de la Nava

Y aquí el mapa de la ruta. Espero que os haya gustado. Hasta otro día.

Ruta: Navalguijo-Pelao Bernardo-Laguna de la Nava-Nava del Barco-Navalguijo

Leave a Comment:

Add Your Reply

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies