El primer día de la primavera 2013 pude observa una pareja en Congosto (León). Más puntual no se puede ser. Las fotos de abubilla que os muestro a continuación son de una pareja a la que estuve observando el año pasado.
Es un ave que cuando llega a España llega impoluto, con un plumaje a estrenar. Sin embargo según van pasando los días cada día lo va teniendo más sucio. Y sobre todo a partir de la puesta y posterior cría de los pollos. Pues al contrario que otras aves que asean el nido evacuando los excrementos de las crías, éstas no lo hacen, de tal manera que el aspecto de la misma y también el olor que van cogiendo no es el ideal.
Sin embargo su plumaje y forma la hacen una de las aves más llamativas de las que crían en España.
Se alimenta de larvas de insectos, orugas y gusanos.
Durante la época de la cría, que se produce en los meses de primavera, el ir y venir del nido es constante, no hay tregua, es de sol a sol. El objetivo no es otro que el sacar a los voraces pollos adelante.
Suele habitar en espacios abiertos no necesitando de bosque para vivir. Anida en huecos ya sea en árboles o viejos edificios, o en oquedades en la roca. La pareja que os muestro habitaba por segundo año en un antiguo nido de abejaruco construido en una pared de tierra.
No os sé indicar qué abubilla de las que salen en las fotos es la hembra y cuál el macho. Ni siquiera las sé distinguir. Así que supongo que no hay dimorfismo sexual en la especie.
El sonido más característico que hace la abubilla es un u-u-u-u. Si bien, en estos días, estoy observando el cortejo (todavía sin posibilidad de fotografía), viendo que su repertorio es mucho más amplio, siseando en algunas ocasiones y produciendo sonidos parecidos a los de un lagarto a la defensiva. Estos sonidos los emiten sobre todo cuando la pareja está enzarzada en sus peleas nupciales. Es un «matrimonio» mal avenido, ahora y durante la cría, pero logran sacar los pollos adelante.
Y para acabar os dejo con un vídeo que recopila algunas de las imágenes que tomé.