Hoy regresamos hasta territorio de Anllares del Sil para describir una ruta corta pero vertiginosa. Vamos a subir la Fana de Resilgar (1.888 m.). Un pico que pasa desapercibido al lado de sus compañeros, el grupo de montañas del Miro que rozan los 2.000 metros, pero que es una gozada llegar a su cima.
Como comentábamos, aunque es una montaña baja su subida no defraudará a nadie pues la dificultad del terreno la hace muy entretenida aunque no apta para cualquiera.
Valdeprado – Arroyo de la Braña del Monte – Braña Viecha – Pozo Cheiroso – Alto de Busmor – Fana de Resilgar (1.888 m.)
Cuando lleguemos a Valdeprado no hace falta entrar en el pueblo. Aparcaremos el coche junto al viejo restaurante que está en la carretera.
Justo aquí:
Habrá que cruzar la carretera y dirigirse caminando en dirección a Ponferrada. Se toma el primer camino que sale a la derecha. Desde ahí todo para arriba. Y muy “pa’rriba”.
Esta primera parte del camino coincide con la descripción que se hizo en su día de la subida hasta el Pozo Cheiroso por lo que podéis consultarla en el anterior enlace.
Como ya se describió en anterior ocasión habrá que estar atentos a los dos cruces que hay del río. El primero puede estar complicado si baja mucho caudal. Hasta el segundo cruce del río nos acompañan por nuestra izquierda los picos de la Cornadiella que alcanzan su mayor altura en los 1.737 m..
Por la derecha tenemos la Fana de Resilgar, nuestro objetivo del día. Su nombre me recuerda a los nombres de los lugares que se dan en «El Señor de los Anillos». Es uno de los topónimos más bonitos de la zona.
Tras el segundo cruce del río enfilamos el tramo final hasta Braña Viecha.
Es un tramo duro, como lo ha sido el anterior. Quizás algo más exigente. En días de sol fuerte puede hacerse muy largo a pesar de su corta longitud. La Braña Viecha está a los pies del Pozo Cheiroso. En sus inmediaciones proliferan las turberas y en ellas las bonitas y escondidas Droseras Rotundifolias. Una de las plantas carnívoras que se dan en la Cordillera Cantábrica.
Sobre el Pozo Cheiroso se puede añadir poco más de lo que se ha dicho ya en esta página. Es un lugar singular, bonito y solitario. En la época en la que está tomada la siguiente fotografía (primavera) vemos como el pozo desagua por un punto. No es habitual ver esto el resto del año.
Ahí lo tenemos con la Fana de Resilgar al fondo. A la derecha está el collado Alto Busmor (Bismor en los mapas) por el que subiremos para acceder al pico.
El Pozo Cheiroso y la Fana de Resilgar(1.888 m.)
A la derecha del pozo Cheiroso según hemos subido se encuentra el Alto Busmor (1.833 m.). Según vayamos subiendo podremos contemplar el magnífico Pozo Cheiroso.
Y también el valle de la Braña del Monte por el que hemos subido. Apreciamos bien las rocosas paredes de la Fana de Resilgar con sus canchales. Al fondo aparecen Catoute, Cerneya y Valdiglesia entre otros. Allá abajo se aprecia uno de los corrales que tenía la Braña Viecha.
Pero las vistas más espectaculares están hacia el lado del Miro y su zona lacustre. Se ve el Cheiroso, negro, profundo.
Al otro lado una buena colección de cumbres (descritas en el pie de foto) y la laguna Bermecha. Azul y cristalina.
Roberto por la cuerda de la Fana de Resilgar. Al fondo la Laguna Bermecha. Más allá a la izquierda Miro de Valdeprado (1.985 m.) y Peña Boquín (1.986 m.). A la derecha Fana del Coronxo (según otras fuentes consultadas Cornón de Busmor que es la que más nos convence)
Aquí viene la parte difícil de la ruta. Mucho ojo. Ese pequeño tramo entre el Alto Busmor y la cima de la Fana de Resilgar puede ser peligroso. En la siguiente foto podéis ver a Roberto levantando los brazos sobre una de las peñas de la cuerda hacia la Fana.
Es rocoso, aéreo y tiene mucha inclinación con largas caídas. Para el que esté acostumbrado a hacer cosas más difíciles le parecerán «campanitas», pero para el que no esté habituado puede representar un riesgo innecesario que debe valorarse antes de acometer el pico. Unos disfrutarán y otros lo pasarán mal.
Si se acomete con miedo, es mejor dar la vuelta.
La vista desde la Fana de Resilgar hacia el sector del Miro de Valdeprado o de Anllares es sublime: (merece la pena ampliar la foto).
Hacia el otro lado tenemos las poblaciones de Brañas de Susañe y Valdeprado bajo el pico Bóveda y el Miro de Susañe respectivamente. Se aprecia muy bien toda la cuerda que recorre estos dos picos y la parte más baja de la misma llamada el Cuchao. Más allá el Alto Sil. Más allá las Ubiñas. En siguiente foto podéis ver todo esto:
El mejor itinerario para la vuelta será el mismo que el de subida.
Hay dos alternativas para la vuelta.
La primera alternativa será bajar por la Laguna Bermecha y después a la Braña de Busmor. Será una bajada incómoda hasta la braña. Desde ahí a Brañas de Susañe, y luego carretera abajo a buscar el coche aparcado en Valdeprado.
La segunda alternativa es bajar hacia la braña marcada en la foto anterior. Después atravesar horizontalmente el paraje de la Movida para regresar al valle por el que hemos subido. Esto es en plan «jabalí», pero es posible hacerlo.
Hasta la Fana de Resilgar tenemos 4 kilómetros en los que se supera un desnivel de 780 metros. La distancia total regresando por el mismo camino es de 8 kilómetros. Poco, pero cañero.